Si no te gusta el sabor de las verduras, hay un truco que puede funcionarte… ¿por qué no «esconderlas» en tus platos preferidos? ¡Así comeras más sano y con menos calorías!
En un estudio reciente varios cocineros mezclaron, en las recetas habituales, puré de zanahoria, coliflor o calabaza, para variar la composición calórica de la comida. De cada receta elaboraron 3 variedades: una sin verduras, otra con algo de verdura, que dejaba la receta en un 85% de calorías, y otra con mayor contenido en vegetales, que dejaba el valor calórico en un 75%.
Dieron a probar a 41 sujetos durante 3 semanas un menú consistente en pastel de zanahoria para desayunar, macarrones para comer y pollo con arroz de cena. Todos los participantes comieron la misma cantidad de comida, sin importar si el valor calórico era del 75, del 85 o del 100 por 100.
El resultado fue el siguiente: los que comieron recetas al 85% de calorías consumieron 202 calorías menos, y los que comieron recetas al 75% redujeron la ingesta de calorías en 357. Sin embargo, los platos les supieron igual, y se sintieron igual de saciados al terminar de comer, lo que concluye que «camuflar» la comida en forma de puré en las comidas puede ayudarnos a cortar la ingesta de calorías.1